4 DE SEPT. DIA MUNDIAL DE LA SALUD SEXUAL

Las personas con discapacidad a menudo quedan excluidas del constructo social de funcionalidad y satisfacción sexual, debido a la existencia de ciertos estereotipos sexuales negativos que suelen tener efectos psicosociales más graves que la propia discapacidad. Son necesarios determinados conocimientos para que el entorno profesional, parental y/o social no trivialice o ignore su sexualidad.

El objetico general es crear conciencia para Aportar información en relación a la educación sexual de las personas con discapacidad.

Las personas con discapacidad tienen derecho:

  • Al ejercicio de una sexualidad placentera, libre, informada y responsable como generador de felicidad, con fines recreativos y no exclusivamente reproductivos.
  • A decidir y ejercer las prácticas sexuales de su preferencia siempre y cuando no sean contrarias a la Ley.
  • A elegir las diversas formas de relacionarse, a elegir con quién compartir su sexualidad, emociones, deseos, placeres y afectos, de manera libre, autónoma.
  • A no ser víctimas de violencia sexual, discriminación, ni coerción.
  • Recibir atención en los servicios de salud sexual y salud reproductiva de manera accesible, gratuita, respetuosa, con calidad, calidez, sin discriminación
  • Ser incluidas en las campañas de información, prevención y atención de enfermedades que comprometan su salud sexual y su salud reproductiva.
  • Decidir de manera libre, responsable e informada sobre tener o no hijas o hijos, decidir con quién relacionarse.
  • En igualdad de condiciones a tener información en formatos accesibles sobre:
    1. La prevención de embarazos no planeados, no deseados, forzados o de alto riesgo.
    2. A solicitar la anticoncepción de emergencia o la interrupción legal del embarazo en casos de violación de manera inmediata, oportuna y diligente.

Conclusiones:

Las personas con discapacidad todavía tienen carencias en relación a la información sexual; esta situación requiere la revisión de los programas de formación e intervención existentes, así como comprobar la accesibilidad a los servicios. Es necesario trabajar desde todos los entornos educadores sexuales existentes, más allá del ámbito sanitario, como es la familia, la escuela y la sociedad. Se debe abrir la educación sexual a aspectos conductuales y sentimentales, mejorando así la intervención en salud sexual de las personas con discapacidad.

 Te recordamos que en Grupo Comercial Orthos tenemos todo lo necesario para poder desarrollar tu ACTIVIDAD PROFESIONAL como terapeuta.  Revisa todas las opciones que tenemos en :   www.grupoorthos.com.mx